Después de todo lo que han retado al funcionamiento regular de la industria, el abandono del sistema común de pasarelas por parte de Vetements no sorprende.
Y es que el sentido del humor es al mismo tiempo problema y solución. Daniel Borrás, (editor Vogue España)
A estas alturas, si no sabes qué es Vetements, te invito a retirarte… No, mentira. Pero así sea inconscientemente debes haber sido víctima –o verdugo- de esta firma.
Y es que Vetements en pocos años lo ha logrado todo. O casi todo –para no ser tan optimistas y regalados-. Cambió el juego de la moda y puso en jaque a mucho de los diseñadores conservadores con respecto al funcionamiento regular de la industria.
La firma nacida en el 2013 actualmente ¡hasta se han convertido en un adjetivo! La descripción de un estilo callejero, irreverente, y a la vez lujoso y muy, pero muy caro, se quedó corta y su estilismo –que comenzó a popularizarse entre influencers, celebridades y otros- se convirtió en un adjetivo en sí mismo. ¡Eso es super vetements! ¿qué más inmortalidad que esa?
Por eso sorprendió poco su salida de las pasarelas, pero ¿cómo iba a ser de otra manera si desde que llegó ha cambiado la forma de hacer moda?
La respuesta al por qué salirse de las pasarelas es demasiado fácil. No obstante, si “lo esencial aún te es invisible a los ojos”, podemos decir que la actitud con la que han tomado TODO en la moda lo predijo. Peor aún, era extraño que ya no había ocurrido.
Vetements adelantó una temporada y se burló de todos. Puso a modelar en sus pasarelas a “la gente de la calle” y rompió las redes sociales las veces que le dio la gana.
La firma llevada a cabo por Demna Gvasalia y otros menos populares que él, convirtió el normcore más extremo en lo más llevado por todo el mundo. Hizo que nos encantara todo lo ordinario y kitsch. ¡Hasta las más ladies cayeron rendidas por una u otra pieza!
¿Cómo olvidar las mangas de largo infinito? ¿O las sudaderas oversize? Las botas hasta las caderas fruto de su colaboración con Manolo Blahnik… o esos jeans con un cierre en la parte trasera que sacaron junto a Levi’s… ¡Tienen tantas piezas polémicas que la lista no acabaría nunca!
¿Y ahora qué?
Ahora salen de las pasarelas porque, entre otras cosas, Demna dice querer volver a los inicios de Vetements. La firma se ha desplazado hacia un estudio en Zúrich y el estilo de vida de sus creadores ha cambiado. “Zúrich es como un paraíso natural, y es probablemente el lugar más aburrido de Europa”, dijo el también Director Creativo de Balenciaga.
“¡Tal vez sea el optimismo suizo! Tengo un estilo de vida muy sano en aras de ser productivo y lúcido. Paso mucho tiempo solo y medito. He comenzado a correr, y las ideas van llegando. No puedes forzar el inconsciente a que actúe. Lo más importante es mantenerse sano y humano. A Guram se lo digo mucho, que lo más importante hora es que disfrutemos lo que hacemos. Afortunadamente somos independientes. Esa es la alegría de Vetements. Quiero devolver a Vetements al punto donde comenzó. ¡No más sudaderas oversized!»
¿Qué haremos sin una de sus piezas icónicas? Nada. Seguro la reemplazan con otro best seller.
La salida de las pasarelas no sorprende, ni es la primera vez que pasa, pero es que al tratarse de esta firma que ha causado tanto revuelo, no se puede hacer más que divulgarlo y pedir más.
Varias grandes casas de moda se han retirado de la semana de la Alta Costura, otras han juntado la colección masculina y femenina para ahorrar, mientras que algunas han utilizado el see now, buy now para equilibrar el despilfarro económico que representa hacer un desfile. Y esa es otra de las razones por las que Vetements lo hace.
“(En nuestro último desfile) pude ver a todo el mundo grabándolo en sus pantallas. Me di cuenta de que el 80 por ciento de las prendas que hicimos no fueron apreciadas ni entendidas. Y fue tan caro. No puedes montar un desfile por menos de 25.000 euros. Aquel costó alrededor de 100.000 euros con la localización. Y hay marcas actualmente que montan desfiles que cuestan millones. Es un completo despilfarro”
Ha llegado un nuevo momento para la moda y todos tenemos que entenderlo. Hasta los más conservadores. Las redes sociales y su instantaneidad lo han cambiado todo y el juego cada vez parece más complejamente simple de lo que las firmas se han imaginado.
Ya hay avances en lo que respecta a las impresoras en 3D, el see now, buy now está mucho más presente y la fast fashion ganando más terreno por, precisamente, la inmediatez con la que sacan tendencias.
“No vamos a seguir desfilando bajo el sistema clásico. Me he aburrido. Creo que (la firma) necesita entrar en un nuevo capítulo. Los desfiles no son la mejor herramienta. Hemos desfilado en un sex club, un restaurante, una iglesia… Adelantamos la temporada, hicimos desfilar las colecciones para hombre y mujer a la vez. Se ha convertido en algo repetitivo y agotador. Haremos algo cuando sea el momento y haya necesidad. Será más bien como una sorpresa”, dice Demna.
Aja, pero… ¿Y lo próximo de Vetements?
Según la entrevista en donde Gvasalia explicó todo, la próxima colección será presentada en su showroom parisino acompañada de música en vivo por una banda de Viena. El creativo tiene en el horizonte nuevos proyectos. Nos invita a esperar y sorprendernos.
“Me gustaría trabajar con gente en Silicon Valley. Quiero trabajar con conceptos.2017 es un momento álgido para ello. Estoy trabajando en un proyecto para el próximo año que no sé cuando estará listo, pero para entonces habrá un evento”.
Por todo esto y más, su salida de las pasarelas no es sorprendente ni impredecible, ¡es puro sentido común y lo más coherente que han hecho!