Llegó la estación que abre un nuevo ciclo en el mundo de la moda de manera oficial, y estas son las tendencias de primavera que no necesitas comprar porque ya están en tu armario. 

tendencias de primavera
“El equilibrio en la vida se logra cuando eres intencional 
en cómo y dónde inviertes tu tiempo, energía y esfuerzos.”
El año de 12 semanas

Para mí, que te guste la moda nunca ha sido igual a comprar tendencias, aunque esto no es excluyente a estar entre ellas o, incluso, comprar alguna que otra pieza. Me explico (y esto ya lo he comentado en mi relación con el consumo un par de veces), todo tiene que ver con saber cuál es tu estilo y qué es lo que quieres transmitir. It’s all about your style.

Mi vida se trata de enseñar eso a la gente. O bueno, parte de ella. Y, con los cambios de temporadas, y por ende de tendencias, siempre estoy pensando en cuáles son esas piezas que todos tenemos en nuestros closets y son las que nos llevan a participar dentro de lo que se considera “trendy” incluso aunque no sea lo que buscamos (como es mi caso).

A veces hay que diferenciar entre querer destacar en un espacio por tener “lo último” o destacar porque tienes un look alineado con todo tu ser y tiene un brillo propio. Esto último es lo que siempre trato. Ahora, que de vez en cuando eso pueda coincidir con alguna tendencia, pues, digamos que es ganancia.

Y eso se logra con ciertas ideas que te comparto a continuación, por que, en este caso, la moda de primavera no siempre significa comprar más. A veces, basta con abrir el clóset con otros ojos, porque si prestas atención a lo que ves en revistas, reels, tiktoks o cualquier otro contenido que te despierta el deseo de consumir, mucho de eso ya vive en tu armario desde hace tiempo. 

Como siempre: la clave está en cómo las llevas, cómo las combinas y, sobre todo, qué historia cuentan.

3 tendencias de primavera que ya están tu closet

Tops que llaman la atención (asimétricos, con escotes o texturas interesantes)

Las blusas para mujer que se imponen durante esta temporada son aquellas con detalles sutiles: mangas abullonadas, escotes en V, tejidos ligeros. También los colores vibrantes o pasteles siempre estarán bien estos meses. Todas tenemos esa camisa de botones en nuestro mejor baby blue (azul celeste), esa que tiene un escote asimétrico o que está hecha de alguna textura interesante. Combínala con jeans rectos o una falda midi, y de pronto parecerá que nació para esta primavera.

Vestidos camiseros o, en su defecto, camisas para hombres

Y si no tienes la camisa baby blue o la eterna blusa blanca, piensa en las camisas para hombres. ¿Tienes alguno en tu vida? ¿Hermano, papá, amigo, novio, roomie? Son las mejores sustitutas porque te sirven hasta como vestido. El truco es jugar con el fit y los colores neutros. 

Elige una blanca, azul cielo o verde oliva. Si tienes un hombre en tu vida seguro tiene alguno de estos colores en su closet. 

Piezas frescas, fluidas, sueltas, sencillas, espontáneas, naturales

Piensa en esa camisa blanca que te acompaña desde hace años. Esa blusa de algodón con estampado suave. Ese pantalón beige que nunca falla. En todas las prendas de lino o seda que has comprado para las primaveras pasadas. 

Las tendencias de primavera más fuertes para este año nos hablan de prendas con líneas simples, colores claros, tejidos naturales… En otras palabras: básicos bien elegidos que probablemente ya tienes.

Recuerda que no se trata de tener más, sino de vestir con intención. Invertir en piezas atemporales es como sembrar en tu clóset: con el tiempo, florecen una y otra vez. Porque las modas van y vienen, pero el estilo auténtico —ese que nace de conocerte—, permanece, como diría nuestro eterno icono de estilo Gabrielle Chanel.

Así que la próxima vez que leas “tendencias de primavera”, recuerda esto: Tal vez ya lo tienes. Solo necesitas mirarlo con nuevos ojos.

¿Te ha pasado?